Mención Honrosa Retrato 2024
02 de junio 2023 | Natalia Aravena fue agredida el 28 de octubre del 2019 por agentes del Estado. Un carabinero, aún sin identificar, le disparó una bomba lacrimógena en su ojo derecho.
«Después de ese día, mi vida nunca ha vuelto a ser la misma. Ha sido una lucha inagotable encontrar al responsable de haberme disparado, (…) hace más de un año y medio mi causa está detenida porque no han hecho las diligencias», aseveró la enfermera de 28 años de edad.
Comentó que ha sufrido discriminación por su caso. Que perdió un trabajo a causa de esto y que la sociedad la ha enjuiciado a ella y a quienes sufrieron traumas oculares durante la revuelta social que comenzó el 18 de octubre del 2019. «Nos culpan de los saqueos, de que nos merecíamos lo que nos hicieron. A mí me han tratado de delincuente y un montón de cosas que se alejan de la realidad. Y es un peso que no debería cargar», expresó Aravena.
Su vida cambió rotundamente desde ese día de octubre. Le cuesta realizar cosas que antes eran muy sencillas, como agarrar algún objeto o manejar su auto, y espera que algún día pueda encontrar justicia. «Yo tenía 24 años cuando me dispararon. Hoy tengo 28 y es fuerte pensar que yo nací entera y nunca lo voy a volver a estar. Nunca voy a volver a recuperar esa parte de mi cuerpo que me fue arrebatada. Es una presión constante con la que aprender a vivir el resto de la vida», finalizó.
02 June 2023 | Natalia Aravena was attacked on October 28, 2019 by State agents. A police officer, still unidentified, shot her with a tear gas canister in his right eye.
«After that day, my life has never been the same. It has been an inexhaustible struggle to find the person responsible for shooting me, (…) for more than a year and a half my case has been stopped because they have not done the due diligence», said the 28-year-old nurse.
She commented that she has suffered discrimination because of her case. She said that she lost a job because of this and that society has prosecuted her and those who suffered eye trauma during the 2019 social revolt. «They blame us for the looting; they say that we deserved what they did to us. They have treated me like a criminal and a lot of things that are far from reality. And it is a weight that I should not carry,» Aravena said.
Her life changed completely since that October day. She finds it difficult to do things that were very simple before, like grabbing an object or driving her car, and she hopes that one day she will find justice. «I was 24 years old when they shot me. Today I am 28 and it is hard to think that I was born as a normal and complete person, and I will never be that way again. I will never recover that part of my body that was taken from me. I have to learn to live with this constant pressure for the rest of my life,» she concluded.
BASTIÁN CIFUENTES ARAYA