FotoPrensa17 – Foto del Año / 1º Lugar Retrato
11 de Octubre 2016 | Carola Barría (35) fue atacada por su ex pareja, quien en un arrebato de celos le sacó los ojos en presencia de su hijo de cinco meses. Estuvo a punto de morir desangrada en la calle, pero afortunadamente un transeúnte la encontró refugiada en una zanja. Hoy, Carola tiene prótesis oculares y ha aprendido a desenvolverse en la ceguera. A finales del 2013 se tituló de educadora de párvulos y actualmente se encuentra trabajando y cuidando a sus dos hijos.
October 11, 2016 | Carola Barria (35) was attacked by her ex-boyfriend, who in a fit of jealousy, gouged her eyes out in the presence of her 5-month-old son. She was close to bleeding to death in the street, but fortunately a passerby found her lying in a ditch. Today, Carola has prosthetic eyes and has learned to cope with her blindness. At the end of 2013, she graduated with a degree in early-childhood education and is currently working and caring for her two children.
Cristóbal Olivares
Mientras sus padres trabajaban, Cristóbal Olivares vive su infancia junto a Alejandro, su hermano mayor, y amigos del barrio con total normalidad, divirtiéndose en las calles de la cuadra. La fotografía llega temprano a su vida; en ausencia de adultos, inventa nuevos juegos para luego registrarlos con la cámara familiar, que utilizaba a escondidas.
“Mi abuelo materno era apasionado por la fotografía y se demoraba una vida en tomar el retrato familiar, era todo un evento. Durante más de diez años anduve en skate y alucinaba con las revistas gringas y sus fotos. Recuerdo también que una vez, durante el matrimonio de un tío, pensé «voy a ser fotógrafo». Mi viejo me había pasado la misma cámara familiar que robábamos para que hiciera fotos del evento”.
El sueño de Cristóbal Olivares (Santiago, Chile 1988) se hace realidad. Hoy, es un fotógrafo documental con especial interés en los asuntos sociales. Ha trabajado para distinguidos medios nacionales e internacionales como The Clinic (Chile), Business Week Mag (EE.UU.), Stern (Alemania), FT Weekend Magazine (reino Unido), The New York Times (EE.UU.), Ojo de Pez (España), Mediapart (Francia), Revista Anfibia (Argentina) y VIA Magazine (Canadá).
Hasta mediados de 2016 formó parte del VII Programa Mentor. Desde 2014 trabaja como co-fundador de Buen Lugar Ediciones, editorial independiente de fotolibros, establecida en Santiago de Chile. Con el libro A-MOR obtiene el premio al mejor libro de fotografía POY (Picture of the Year) Latam 2017, que cada año destaca lo mejor de la fotografía documental iberoamericana.
“La fotografía para mi es principalmente una forma de expresión. Por supuesto el registro y el documento son importantes, sobre todo para futuras generaciones, pero no lo veo como un registro objetivo, sino más bien como registro de mi propia experiencia y punto de vista. Es una excusa para acercarme a temas que sin la cámara no tendría el valor de hacerlo, y el resultado es una suerte de libreta de apuntes en imágenes que adquiere un valor muy relevante al momento de hacerlo público, porque eventualmente genera diálogo y visibilidad sobre un tema”.
Precisamente, durante este último tiempo, mediante su trabajo fotográfico, Cristóbal Olivares se ha encargado de evidenciar el martirio de las mujeres, la violencia machista y el femicidio, tema central de la Foto del Año en Fotoprensa 2017.
“El femicidio es la expresión máxima de violencia contra la mujer, después de un largo círculo vicioso de violencia física y psicológica, pero también habla de lo mal que estamos como sociedad en términos de educación, donde la enseñanza sobre relaciones de género es casi nula. Creo que además de exigir nuevas políticas al gobierno en varios ámbitos -algo que hay que hacer sí o sí- nosotros, los hombres, tenemos que luchar por erradicar el machismo. Es nuestra tarea aprender más de las mujeres y sobre su razón de lucha, porque ellas están en una desventaja e injusticia terrible por causa nuestra”.
“No se trata solo de levantar el puño cuando la noticia marca la pauta, ya que esto pasa todos los días y como fotógrafos y comunicadores tenemos muchas formas de aportar para que cambie”.
While his parents worked, Cristobal Olivares led a totally normal childhood alongside Alejandro, his older brother, and neighborhood friends, playing in the streets around his block. Photography made an early entrance in his life. In the absence of adults, he invented new games and then documented them using the family camera, which he used secretly without permission.
“My grandfather on my mother’s side of the family was a big fan of photography and would take forever to take the family portrait. It was always a big deal. For 10 years, I rode a skateboard and was crazy about American magazines and the photos in them. I remember thinking once at an uncle’s wedding, «I’m going to be a photographer». My father had passed me the same family camera that we used to steal so I could take pictures at the event”.
Cristobal Olivares’s (Santiago, Chile 1988) dream came true. Today, he is a documentary photographer with a special interest in social affairs. He has worked for distinguished national and international publications like The Clinic (Chile), Business Week Mag (USA), Stern (Germany), FT Weekend Magazine (UK), The New York Times (USA) Ojo de Pez (Spain), Mediapart (France), Revista Anfibia (Argentina) and VIA Magazine (Canada).
Until mid-2016 he was part of the VII Mentor Program. Since 2014 he has worked as co-founder of Buen Lugar Ediciones, an independent photobook publisher, based in Santiago, Chile. His book “A-MOR” won the 2017 LATAM POY (Picture of the Year) Best Photography Book Award, which each year showcases the best in Ibero-American documentary photography.
“To me, photography is mainly a form of expression. Of course the recording and documenting aspects are important, especially for future generations, but I don’t see it as an objective record, but rather as a record of my own experience and point of view. It is an excuse to approach subjects that, without the camera, I wouldn’t have the courage to, and the result is a kind of notebook of images that takes on a very important value once published, because it leads to dialogue and gives visibility to a topic”.
As of late, via his photographic work, Cristobal Olivares has focused on portraying the martyrdom of women, gender violence and femicide, central topic of the 2017 Fotoprensa Picture of the Year.
“Femicide is the maximum expression of violence against women, after a long vicious circle of physical and psychological violence, but also talks about how far behind we are as a society in terms of education, where teaching about gender relations is almost inexistent. I believe that in addition to demanding new policies from the government in several areas –something that must be done no matter what- we men must fight to eradicate sexism. It is our job to learn more about women and their struggle, because they are at a terrible disadvantage and face injustice caused by us”.
“It’s not about only becoming activists when the topic is in the media spotlight, because that happens everyday. As photographers and communicators there is a lot we can do to bring about change ”.